Tener acceso a la educación es un derecho fundamental para todos los niños, y es vital para su futuro. Sin embargo, en Villa Leidy, cerca de la ciudad costera de Santa Marta, Colombia, más de 70 estudiantes enfrentan un peligro cotidiano en su viaje hacia la escuela. Su camino a la educación los lleva a cruzar un puente improvisado sobre el infestado Río Gaira.
Este "puente" está construido con tuberías que suministran agua a toda la localidad y una cuerda. La madre de uno de los estudiantes, Dorisa Fadul, relató a los medios locales: "El puente anterior lo construimos nosotros mismos, pero comenzó a deteriorarse en enero de este año. Era un puente de madera que colapsó por completo el 1 de julio".
Los padres han suplicado al consejo municipal de la ciudad que construya un puente más seguro, pero sus peticiones han sido ignoradas. Los niños en Villa Leidy ponen en riesgo sus vidas diariamente para asistir a la escuela.
Las familias locales están exigiendo a las autoridades que les construyan un nuevo puente. Dorisa Fadul explicó: "En este momento, los niños corren el riesgo de ser arrastrados por el río porque no tienen un puente decente para cruzar. Todos deben usar el puente si quieren abandonar el vecindario, y esto pone en riesgo a todas las personas, desde los niños hasta los ancianos y las mujeres embarazadas".
Eduardo Fadul, quien ayudó a construir el primer puente que colapsó, afirmó: "Hemos tocado muchas veces la puerta del alcalde para exigir un nuevo puente. También informamos a la oficina de gestión de riesgos de Santa Marta. Nos prometieron un puente, pero no lo han entregado".
Fadul explicó que cuando los niveles de agua son más bajos, la gente puede utilizar una balsa proporcionada por un residente local para cruzar las aguas infestadas de caimanes. Sin embargo, cuando el río está alto, no pueden arriesgar sus vidas ni las de los niños, y es entonces cuando deben cruzar a través de la tubería que suministra agua potable.
Hasta el momento, las autoridades no han informado a los residentes cuándo planean construir un nuevo puente. Esta situación es aún más preocupante considerando que Villa Leidy se encuentra cerca de El Rodadero, uno de los destinos turísticos más populares de Colombia.
La educación es la clave para un futuro mejor, y los niños no deberían verse obligados a arriesgar sus vidas para obtenerla. Los habitantes de Villa Leidy merecen un puente seguro que les permita acceder a la educación de manera adecuada. Es fundamental que las autoridades escuchen sus demandas y tomen medidas para garantizar un acceso seguro a la escuela.