Por segundo día consecutivo, Rusia ha bombardeado Ucrania, después de que Ucrania asumiera la responsabilidad de bombardear el puente de Crimea.
19 civiles murieron en la última ronda de bombardeos. Rusia disparó ayer 81 misiles contra Ucrania y casi la mitad fueron derribados. La cantidad de misiles disparados hoy aún no se ha confirmado.
Al menos tres misiles también alcanzaron infraestructura crítica en Lviv, dejando sin energía a gran parte de la ciudad ucraniana occidental solo unas horas después de haber sido restaurada tras los ataques del día anterior, dijo el alcalde Andriy Sadovyi.
El ministro de Relaciones Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba, dijo que las instalaciones energéticas de su país se han convertido en los “objetivos principales” de Rusia.